Se denomina así, por que a fines del siglo XIX los
pescadores del norte del Perú, apreciaban que cerca a la navidad, había un
incremento de la temperatura de las aguas marinas y estas corrientes de aguas
cálidas las asociaban con la llegada del Niño Jesús.
Este fenómeno, es un calentamiento anormal del Océano
Pacífico frente a nuestras costas, el cual durará varios meses y se produce
cuando los vientos alisios se debilitan, las aguas cálidas llegan a las costas
del norte de nuestro país y las aguas frías de la Corriente Humboldt se alejan
y se profundizan hasta 200 metros.
60 días de lluvias torrenciales permanentes se
esperan en la costa norte del país y 827 distritos en quebradas serán
gravemente afectadas por las lluvias superiores a sus condiciones normales, lo
cual afectaría a 18 millones de habitantes. Este fenómeno se inició en abril de
éste año y conforme avanza el tiempo, también avanza su intensidad, que según
la escala que utiliza el Instituto del Mar del Perú, ya estamos en 2.5°,
respecto a un rango de 1.7° y 3° (fuerte), e incluso se teme que se extienda
hacia el verano del próximo año.
En consecuencia, ya es muy tarde para la ejecución
de obras de defensa ribereña y las entidades del gobierno nacional, regional y
local, deberían de intensificar las labores de descolmatación de los cauces de
los ríos, limpieza de quebradas y drenes y adoptar medidas que protejan las
carreteras del país.